“No es lo que dices sino cómo lo dices” seguramente has escuchado esta frase alguna vez o quizás te la ha dicho tu pareja. Bueno, es que nadie es perfecto y ninguno lo será… sobre todo cuando se trata de relacionarse en pareja. Sin embargo, existen ciertas condiciones que se dan en parejas exitosas que no se manifiestan en las demás, una de esas es que cuando se equivocan, estas están dispuestas a “reparar” los errores que han cometido.
John Gottman quien es mundialmente conocido por su trabajo como investigador de los predictores en la estabilidad de la pareja refiere a lo largo de más de cuarenta años la importancia de la reparación durante y después de una pelea. Además, enfatiza que esta es una de las llaves que predice el éxito en la relación de pareja.
Platiquemos ahora ¿qué es reparar? De acuerdo con DRAE (Diccionario de la Real Academia Española) significa arreglar algo que está roto o estropeado. También se refiere a enmendar, corregir o remediar.
Cuantas veces en pareja se discute, se pelea y se ofende uno al otro sin ni siquiera pedir disculpas y volver a hablar del asunto. En otros casos, se cometen acciones que hieren profundamente por expectativas que no se cumplen rompiendo corazones. Es entonces donde entra el llamado SOS a un compañero que sea capaz de ver con empatía y compasión el sentimiento y la perspectiva del otro, sin justificaciones. En algunos casos se continúa la vida sin hacer consciencia de la forma en que se ha hecho sentir al compañero de vida. Todas estas acciones van restando a la cuenta emocional de la relación de pareja hasta que se enfría y se deteriora. Después se cuestionan: ¿por qué ella o él ya no es tan cariñoso o cariñosa? o ¿por qué ya no se comunica como antes? La respuesta está en que se necesita la reparación del error cometido; de tal manera que se demuestre respeto, estima y se muestre valor a la relación de pareja como a la persona que se ha escogido para compartir la vida. La reparación del error cometido es mejor recibida si a lo largo del tiempo de la relación se ha hecho una buena cuenta de ahorro emocional.
¡Atrévete a reparar!